lunes, 31 de octubre de 2022

 -"Sonríe mucho en todo el día, sobre todo cuando me ve trabajando y no tiene reparo en decirme si algo no le gusta o si se vería mejor con otro color diferente, pero sobre todo le gusta más presumirle a la gente si al ir por la calle ve trepado en algún muro algo que hice yo, cuando cocino la puedes ver rondando como ratón cerca de la mesa, toda curiosa ella intentando adivinar qué habrá para cenar, es más tolerante al picante que yo, aunque creo que ese gusto le viene del lado de su madre; Tiene buen olfato y ya sabe distinguir de algunos quesos y especias, hasta ahora le gusta el manchego y el mozzarella y de especias la pimienta y la canela, a veces la dejo que me ayude a poner la mesa y quiere aprender a preparar galletas algún día, toma leche como borrego y le gusta mucho cómo huele el café aunque lo toma con leche como yo, y con tres de azúcar como nosotros dos.

Tiene un cajón donde guarda cualquier cosa que le llame la atención por su forma o por el color, le he visto guardadas desde piedras hasta corcholatas, mueve los pies en la silla cuando se pone a colorear en la mesa, y aunque ya comienza a tener buen oído para la música, irremediablemente también le viene en la sangre los ritmos tropicales que tanto le gustan a su madre, odia que fume y más si lo hago muy temprano en las mañanas, pues está convencidísima de que le duraré mil años, tanto que me ha hecho bajar de veinte cigarros a 6 al día para empezar, pero curiosamente no tiene nada en contra del olor a habano; Le gustan los gatos y los lobos también y no me corrige cuando le digo pongüina, aunque quiere que su primer mascota sea un cotorro al que le pueda enseñar algunas palabras, habla mucho y mueve las manos cuando te platica de algo y puedes ver cómo sus ojos se agrandan cuando se emociona al contarte algo nuevo que vio.

Probablemente se sienta la niña más fuerte del mundo, pues cuando me despierta en las mañanas, le hago creer que con solo jalarme un dedo del pie puede hacerme parar de la cama sin mayor esfuerzo, para desayunar le gusta el cereal de chocolate para beberse del plato lo que queda al final cuando se lo termina, pero para cenar le gustan las quesadillas de harina un poco crujientes con un vaso de leche fría, no perdona las palomitas en el cine o cuando vemos películas en casa y puedo decir que ya me sé de memoria cualquier película que tenga el sello de Disney pintado en la caja, y cuando caminamos por la calle y voltea a verme mientras mi mano envuelve por completo a la suya, pareciera como si estuviera viendo a un gigante que puede contra todo lo que se nos ponga en frente y que a pesar de lo que pueda pasar en esta vida a veces tan extraña y absurda, sabe de cierto que nunca la dejaré sola".

Frida (Fragmentos)

1 Noviembre 2011


-----------------------------


Se hablaba ya tan poco de ella desde hace tanto, decidí hace unos días que, de entre todas, pedí que esa fuera una de las cajas que iría abriendo de apoco. Allí la escondí junto con tantas cosas buenas de nosotros, la puse ahí para no perderla y no le pasara nada.

Frida, Almudena, Amalia, a lo largo de los años ha tenido varios nombres, la concebí en mi corazón solo para nosotros dos, y desde entonces no he hablado de algo así con nadie más que no seas tu. La llevo conmigo aunque no lo diga, para mi es de los sentimientos más profundos y puros que tengo contigo y hacia ti, la niña de la que hablamos muchas veces que tendríamos, sé que aún guardas sus calcetines de pingüino, créeme, yo también la tengo aquí conmigo.

A la par de ti, ella es quien más me rompe, cuando volteo a ver a algún extraño con alguien similar a la edad que tendría, no dejo de pensar que deberíamos ser nosotros tres, lamento con el alma entera el no tenerla aquí con nosotros todavía, las amo tanto a ustedes dos, es inmensamente doloroso, no sé en qué carajos estaba pensando cuando alguna vez te llegué a decir que no quería, pero qué estúpido fui, si para mi, ella es una extensión de lo que siento yo por ti, cómo no quererla aquí?.

No solo te la negué a ti, me la negué a mi mismo, me arrepiento tanto el haber pospuesto la creación de nuestra familia. Te confieso que en parte, siempre tuve el temor de saber qué pasaría con ella si nos abandonáramos alguna vez, debí pensar más bien, en la vida que podríamos darle entre los dos de haber tenido a tiempo las herramientas para saber cómo expresar todo esto que siento ahora.

Aunque te cueste creerlo, la tengo aquí conmigo, con todo lo que llegamos a imaginar de ella, su manera de ser, su sonrisa, sus ojos grandes y hermosos como los tuyos y la nariz de bola como la mía. Siempre la quise para nosotros, la quiero tanto para nosotros si algún día la vida nos lo permite.

Hay tantas cosas que aún estoy desenterrando de donde las tenía, tratando de saber qué hacer con todo ello, aprendiendo a quitarles las piezas que les sobran, desprendiéndole de a poco todo el dolor que está adherido a todo este amor que te tengo.   

P.D. Siempre he amado la manera en que tu también hablabas de ella
entrelobosgatosylunas.blogspot.com/Esperanzas pintadas en el vientre


"...Tu nombre siempre al óleo y en cursivas, labios rojos comunistas, de corona las gerberas que algún día quisiera plantar en mi jardín."

Sentimiento Base

 ¿Bajas a cenar?

Hay una imagen en mi mente que en ocasiones merodea incesantemente en los momentos previos de irme a acostar, es tan palpable que se confunde con la realidad, y tan específica que me hace pensar que quizá en algún momento ya he visitado ése lugar, pudiera ser un sueño recurrente o el prólogo de un cuento aún sin contar.

Frente a mis ojos, una casa como las de antes, esas de portón grande y piso de cantera, con árboles tan altos y frondosos que apenas dejan espacio suficiente para que se cuele el sol, con jardines amplios rodeados por flores que impregnan el ambiente con su olor.

Pudiera estar alguien en casa, en la cochera se encuentran aparcados una motocicleta color negra de nariz larga, diseñada para un tripulante pero modificada intencionalmente para incluir a alguien más, con acabados cromados y un escape que al ponerla en marcha hace temblar el lugar, a su lado, un mustang 69 del mismo color, con interiores en piel y un motor que al encenderse es capaz de reventar los cristales a su alrededor, aunque me intriga el detalle de un garfield colgado en el espejo retrovisor y los juguetes distribuidos al azar en el asiento posterior.

Un lobo siberiano de nombre Sabbath se encarga de custodiar el lugar, convive a su vez con Moka, una coqueta y desvergonzada gata siamés de patas cafés y orejas que hacen juego con el color de su cola, paso frente a ellos sin ninguna reacción en absoluto de su parte, no soy un intruso o una amenaza, inspecciono el lugar con detenimiento, mientras de la parte trasera del jardín se escuchan aproximarse presurosos unos pasos pequeños, se acerca a mi una nena de corta edad y que apenas si alcanza mi cintura, ella no se dirige a mi por mi nombre de pila, ella me llama de una manera distinta que los demás; su mirada heredó ése fuego en los ojos, ése rasgo característico de un alma valerosa con instinto animal, pero con la dulzura exacta para poner mis piernas a temblar, un sentimiento me invade al verla, por ella haría lo que fuera, sin titubear.

Confundido y abrumado por lo que mi mente me va relatando continuo el recorrido, me dirijo a la entrada principal, una pesada puerta de roble con herrajes patinados me impide continuar, busco en mi bolsillo algún objeto con el que pueda anunciar mi llegada y descubro intrigado que entre mis pertenencias llevo conmigo la llave que me permite entrar, por alguna razón conozco hasta el truco que tiene la chapa para poder hacerla girar, -vuelta completa a la derecha y girar solo un poco a la izquierda antes de jalar para abrir-, al primer intento lo logro, como si lo hubiera hecho durante toda una vida.

Ya adentro se respira un aroma a madera y manzanas, indago con cautela para no llamar la atención, los muebles se encuentran justamente donde los hubiera puesto yo, del color exacto en el que hubieran sido elegidos después de una entretenida discusión, algunos cuadros decoran la estancia, en algún lugar he visto la firma del artista, no puedo recordar con exactitud, conozco dónde estoy por alguna extraña razón; por fin!!, retratos acomodados en la mesa junto al sillón, me acerco y tomo uno para verlo de cerca, a primera vista ubico la mirada de la nena, hay dos personas mas en la imagen, pero un error de enfoque distorsionan los rostros y me dejan con más dudas que respuestas.

Continúo mi expedición, mis pasos me llevan a una habitación muy peculiar, ahí se refugia una dama muy especial, hay libros acomodados cuidadosamente por autor y por tema, un diván acolchado acomodado junto al ventanal para alguna sesión de relajante lectura, una cámara sobre el escritorio rodeada por varios rollos sin usar y negativos revelados de alguna sesión inesperada, de esas que suceden cuando las imágenes desean ser capturadas sin ninguna razón aparente, hay una nota escrita de puño y letra, la curiosidad es más grande que el deseo de no leerla, -“Regreso en un par de horas, te encargo a la nena, Sabbath la está cuidando en el jardín, regreso para cenar, le das de comer a Moka no se te vaya a olvidar”- se lee en la hoja, la dejo en su lugar, aún me faltan lugares por explorar y por lo que veo el tiempo no es algo que pueda darme el lujo de desperdiciar.

Recorro las instalaciones como si yo mismo hubiera construido el lugar, conozco los pasos precisos que se ocupan para recorrer cada pasillo y sé cuantos escalones conforman la escalera y hasta el material que se ocupó para tapar las goteras que aparecieron en el último cambio de estación, sigo caminando mientras mi mente recuerda poco a poco el por qué es que sé perfecto en dónde estoy; en la parte de arriba me encuentro con su habitación, la de ellos, una cama de proporciones épicas con sábanas de seda me indican que para ellos no hay límite de espacio ni tiempo al momento de amarse, de soñar, de escucharse mutuamente respirar.

A pocos pasos de ahí descansa la nena, en su reino privado con su techo de estrellas pintadas a mano aquella tarde de domingo, cuando decidió que quería acortar la distancia entre ella y saturno sin tener que pasar frío por dormir en el exterior, y así fue, una a una, con todo y destellos se hizo de su constelación particular, no fue por capricho, simplemente la creatividad e imaginación que los genes le van concediendo poco a poco conforme gana edad.

De repente, un aroma va recorriendo cada una de las habitaciones, alguien se encuentra en la cocina, el sonido de las cacerolas en la hornilla delata su presencia, entro en pánico por el temor a ser descubierto, busco la manera de escapar sin ser detectado, o en su defecto una manera rápida de despertar, se escuchan risas y murmullos a lo lejos, de repente una voz familiar me grita desde el descanso…

-“Estamos sentados en la mesa, te estamos esperando….¿Bajas a cenar?...”


Marzo 21 / 2010

sábado, 29 de octubre de 2022


Si alguna vez te preguntas cuánto te quiero, le puse tu nombre a todas las olas del mar.

Ejercicio #8


"Para mí de ella todo, su andar porteño de tango y bolero, sus hombros pequeños de terciopelo, sus pechos mi pan con lunas de queso, su vientre, mi catedral y fortaleza amurallada, mi casa sin paredes, sin techo ni ventanas, sus ojos acanelados y sus labios púrpuras como las nubes que pinté con mis dedos alguna vez en sus caderas". C. Diciembre / 2010

--------------------------------
Hace algunos días te intentaba describir lo que es mi "sentimiento base", el de origen con respecto a ti y a nosotros, trataba de explicarte el por qué después de tanto caos y heridas mutuas, cómo es que me sobreviven todavía emociones tan profundas y arraigadas en mi ser, lo que acompaña a este texto es el ejemplo más claro que pude encontrar, hay ocasiones en las que necesito urgentemente intentar transmitirte lo que siento. De entre las asignaturas a realizar periódicamente está ésta de la introspección, ese ejercicio a veces incómodo y doloroso de ahondar en uno mismo, y tratar en el proceso el localizar los puntos de partida y de ruptura. A mi personal punto de vista y en la forma que nos he vivido, lo hemos tenido todo en distintos puntos de la historia, sin embargo, el tenerlo todo de facto también abruma y nos hace desconfiar y tomar decisiones equivocadas, ninguno de los dos supimos bien cómo sostenernos sin miedo, sin rompernos, volamos tan cerca del sol y nos quemamos las alas varias veces en el intento. A lo largo del tiempo nos hemos huido entre sí innumerable cantidad de ocasiones, nos hemos mostrado los dientes y varias veces cada quien se apartaba del otro por las cicatrices causadas, nos hemos mentido al decir que sentimos más en otros lados, cuando la realidad es que ambos extrañamos la manera en que nos hicimos sentir la primera vez. Hemos llegado a negarnos y a desconocernos a nosotros mismos y todo a partir del miedo, miedo a pertenecer, a entregarse, miedo a sufrir a causa del otro, a la incertidumbre, miedo al abandono, miedo a repetir las historias familiares, miedo a soltarse. Doce años y contando de esa grabación, y desde entonces han pasado muchas otras despedidas a la par de dolorosas, me costó tres días recordar la contraseña para acceder a donde estaba guardado, me costó mucho más en su momento grabarlo. Recuerdo en su momento esa constante sensación de abandono, de tener que empezar de nuevo a reunir los pedazos y hacerlos funcionales, el tener que competir, esa sensación de sentirse insuficiente o algunas veces utilizado, sin embargo, el paso de la vida y de los años me enseñó que lo que realmente sentía era miedo a sentir, a dejarme fluir a mi mismo y eso me hizo reflejar en ti todo eso y causarte un daño injustificable, fallé en cuidarte, en cuidarnos, ignoraba muchas cosas de mi. Esas dos personas que aparecen ahí somos nosotros libres de dolor, así somos realmente en la intimidad cuando no sentimos la necesidad de protegernos de nosotros mismos, ahí en ellos reside mi "sentimiento base", el punto de origen, te amaba tanto, tan desaforadamente, tan intensamente, tanto, pero tanto como lo sigo haciendo ahora mismo que redacto todo esto. Con el paso de los años nos hemos guardado resentimientos y también las cuentas de los daños, nos condicionamos mutuamente en distintos puntos de esta historia, olvidamos quienes fuimos, olvidamos quienes somos realmente debajo de tantos daños. Poca gente en este mundo tiene la fortuna de decir que ha conocido al verdadero amor de su vida, para mí lo has sido tú desde entonces hasta hoy, quisiera que sepas que te sigo eligiendo día con día, que quisiera me dejaras quererte bonito por el resto de esta vida, así, sin ese miedo a que ya no vayas a volver, te prometo por ellos dos que ves ahí que no nos tiene qué doler.

jueves, 27 de octubre de 2022

Hay veces que este proceso ha sido tedioso y hasta frustrante, como cuando tengo que explicar el por qué de algunas de mis analogías que uso para poder abrirme y así poco a poco comunicar. Justo hoy me preguntaron si quería abrir alguna de mis "cajas" en particular, confieso que la que escogí apenas si levanté un poco su tapa y ya me tenía completamente de rodillas llorando a mares frente a un extraño que lo único que intenta es ayudarme a que yo mismo sepa qué hacer con todo esto. Solo puedo decir que allí está una de las pocas cosas que guardé conscientemente sabiendo que lo que ponía en ella era para salvarlo de aquel incendio.

Sabes, a veces mientras sucede el día me da por pensar que en algún momento alguien a lo lejos gritará "¡Corte!" y se abrirá la toma y nos mostrará a los dos en medio de un set donde se graba ésta película que llamamos vida, nos tomaremos de la mano y nos iremos a nuestro camper para desmaquillarnos y mientras te veo sonreír nos felicitamos mutuamente de lo bien que nos ha quedado la escena, esa donde aparentamos odiarnos hasta los huesos y deseamos no habernos conocido ninguno de los dos.

La vida real acontece de una manera completamente diferente, el día transcurre muchas veces sin tanta espectacularidad, otras veces incluso lentamente, mientras intento moverme entre las horas con una carga enorme de culpa, arrepentimiento y ansiedad, mientras eso sucede intento separar de entre todas esas emociones todo el amor que te tengo.

Tengo una duda de paciente que quizás por tu experiencia me la puedas resolver, ¿es normal llorar así de esa manera tan inconsolable?. Algunas veces he sentido que me he vaciado por completo y aún así no para.

Hoy fue jueves y te extrañé encabronadamente, no sé en dónde estarás ahora, pero me hubiera encantado me acompañaras al super, llegar a la casa y hacerte algo de comer mientras eliges algo para ver mientras cenamos.

¡Puta madre! no sabes cómo me hace falta hacer algo que te guste, que te emocione, algo que te haga voltear a verme y sentir.


Y cuando te busco, no hay sitio en dónde no estés.

miércoles, 26 de octubre de 2022

 He pintado mi casa del color de tus ojos por si algún día decides buscarla, la puedas volver a encontrar.

Ejercicio #7

Donde sea que te encuentres quisiera decirte que no tuviste la culpa de nada, no debiste ser el sustituto de nadie ni volverte fuerte de la noche a la mañana y tomar la posición de quienes simplemente decidieron no hacer lo propio, sé que sentías que no tenías alternativa pues te abrumaba la angustia de pensar que si no lo hacías así, serías el responsable de lo que llegara a suceder. 

Debiste poder estar más tranquilo, soñar en lo que deseabas, jugar más, conocer más gente, no avergonzarte por comer lo que te gustaba, debiste seguir dibujando sin pensar que era una pérdida de tiempo o que no lo hacías tan bien, porque sabes, lo hacías muy bien, mejor que muchos otros, todavía guardo ese plano de la cartelera para cine que imaginaste, esa cabina personal donde te acercabas y podías ver el avance como si estuvieras dentro de la misma película, te sorprendería saber que hoy en día la gente usa unas gafas similares para recrear ambientes y lugares y sentir como si fueras parte de ese espacio y todo eso alguna ves salió de ti. 

Siempre fuiste muy inteligente, se que lo dudabas porque a veces tus notas no lo reflejaban en papel, pero créeme, siempre has sido un genio, observabas a detalle con tus ojos grandes, tu curiosidad te hacía saber de muchas cosas, solo te faltaron cerca más personas que supieran como emocionarte para así tener toda tu atención. Siempre querías saber como funcionaba todo, desarmabas lo que tuvieras a la mano y con sus piezas hacías otras cosas diferentes, como aquel ventilador de mano con una batería y el motor de un carro de juguete. 

Las personas a veces no lograban entenderte pero créeme, nada nunca estuvo mal en ti, es solo que a veces la gente ni siquiera entiende la vida misma. Debiste haber podido ser un poco más egoísta, ponerte a ti primero así como los demás querían ser la prioridad sobre de ti, lamento tanto que te enseñaran que no había tiempo para sentimentalismos, eso nos costó no haber podido llorarle como tanto hubiera querido a nuestra abuela el día que se despidió, reprimirnos nos ha costado el amor de mucha gente, es necesario que sepan lo que sentimos aunque no seamos correspondidos, siempre, siempre es mejor decirlo. 

Debieron cuidarte más y no dejar que te apagaran, debieron procurarte y no usarte en conveniencia dependiendo de lo que necesitaban, debieron enseñarte a defenderte, no tenías por qué acostumbrarte a los golpes o a tener miedo de asistir a clases, y cuando quisiste salvarte por tu propia cuenta, debieron apoyarte cuando decidiste devolver esos mismos golpes cuando te cansaste, debieron tener el tiempo de escucharte a ti y no de hacerte escuchar de ellos todas las quejas que tenían entre sí, no debiste ser juez y parte ni tener que conformarte a pasar las navidades en casas diferentes ni evitar decir sus nombres dependiendo de quien estuviera cerca. 

Se lo mucho que te ha costado sobrevivir, te cubriste tanto y de tantas cosas que construiste con el tiempo una fortaleza al rededor de ti que aún a estos años a la gente le parece impenetrable, no te culpo, tenías que ver la manera de hacer lo mejor que podías con lo poco que tenías a la mano. A pesar de lo que hemos logrado hasta ahora, aún tenemos mucho miedo todavía, a no ser suficientes, a no ser capaces, a no vernos aceptables y a muchas otras tantas cosas más. Quisiera decirte que intento curarte, que trato todos los días de darte un poco de lo que nos ha faltado, acá afuera hay personas que han sufrido las consecuencias de nuestras carencias por las heridas que no supe cómo atenderte a tiempo. Perdóname por creer que te había dejado en el pasado, te abandoné mientras intentaba descifrar cómo procesar tanto daño, perdóname por dejarte solamente acompañado de éste dolor profundo, no te correspondía a ti saber qué hacer con tanto.

Fuiste el receptor de todas las primeras cosas que nos han marcado, el primer abandono, la primera decepción, la primera traición, la primera humillación, todas esas cicatrices las llevaste tu y después las heredé yo, tengo tanto anhelo de que puedan ver completo lo que somos más allá de todas las imperfecciones, nuestra esencia, esa que hemos tratado de cuidar para que nadie la vuelva a lastimar. 

Quisiera hacer un trato contigo, acompáñame aquí a donde estamos ahora y dejemos que vean lo que ambos conocemos de nosotros, qué importa si no les gusta lo que ven o si les parece aburrido, dejemos este miedo que nos ha detenido a entregarnos, confía en nosotros, intento repararnos poco a poco, he venido hasta aquí por ti para mudarnos juntos a un mejor futuro.

Te mereces todo lo que deseaste alguna vez y te mereces el esfuerzo que sigues haciendo día con día para lograrlo, te mereces cada espacio que te has ganado y el lugar que protegiste, por eso y tanto más, Gracias.

martes, 25 de octubre de 2022

 A mi ansiedad le gusta decirme al oído "No me importa si crees que hoy has hecho todo bien, mira ten, revisa toda esta larga lista de las cosas que pudiste haber hecho mejor, ah por cierto, lo quiero todo resuelto para hoy".

Mi ansiedad no tiene horario laboral ni sabe de días feriados, bien puede llegar justo al despertar, mientras voy manejando o se espera hasta la madrugada para verme dar vueltas en mi cama hasta el amanecer.

Le divierte sentarse junto con la angustia en mi pecho para ver qué tanto me cuesta respirar, no soportan la total oscuridad ni el silencio absoluto.

A mi ansiedad no le gusta el agua ni los vegetales, prefiere las cosas con mucha azúcar y con sal, y un toque de culpa como postre para terminar.

Cuando viene de visita trae consigo un cosquilleo insoportable en las palmas de mis manos. Respirar profundo muchas veces no funciona, a veces solo desasocio para intentar quitarle algo de atención.

Mi ansiedad es egoísta y no le gustan las cosas que me dan tranquilidad, hay días complicadísimos que se luchan detrás de una puerta intentado hacer el menos ruido posible.

A veces gana ella, pero muchas otras gano yo.

lunes, 24 de octubre de 2022

Lunes de Octubre


Los que en verdad lo saben dicen que, "Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse a pesar del tiempo, del lugar, y de las circunstancias. Y que ese hilo puede tensarse o enredarse, pero nunca podrá romperse".

Sería incapaz de hacerte total responsable de todo mi sentir pues yo mismo me até a conciencia ese hilo a mi dedo índice, justo allí donde se encuentra el lunar que compartimos en común, el mismo que se alinea con el tuyo cuando juntamos nuestras manos.

Pensar que coincidimos solo por azar sería ignorar las causalidades que nos trajeron hasta aquí. De entre cientos de millones de ambulantes en algún punto de la historia, nuestros pasos se encontraron entre sí. Para mí, decirnos sí, siempre ha sido la mejor de las respuestas que nos hemos dado cuando nos preguntamos ¿Qué es lo que hacemos aquí?.

Te he querido a mares, en calma y en tormenta, te he querido incluso también en el dolor, Hemos tirado de ese hilo con tantas fuerzas hasta lastimar, y otras veces se ha soltado al punto del arrastre, tanto que quizás nos haya hecho dudar si aún lo llevamos puesto todavía. El extremo del mío lo tengo en el mismo sitio donde me lo puse el día que te conocí.

He fallado en conmoverte, en emocionarte, en inspirarte, he fallado en cuidar de este hilo rojo que nos une aún también en lejanía. En este tiempo a solas conmigo mismo te he estado tejiendo un abrigo nuevo que nos cubra a los dos con el amor que -hasta ahora-, no sabía cómo darte y que siempre tuve aquí conmigo para ti.

Te llamo a través de estas letras, como cuando niños se jugaba a hablar con alguien al otro lado de la habitación con un vaso atado a un pedazo de estambre, y tenías que intentar guardar silencio para así lograr oír lo que cada quién tenía qué decirse, así mismo aquí y ahora, entre todo el caos y dolor que causa la incertidumbre, toco despacio de este hilo como a una cuerda, para hacerlo resonar esperando que me escuches allá hasta donde sea que tú te encuentres. 

Desde este extremo de la hebra, te cielo hasta las nubes.


Lunes 24 de Octubre 2022

 

domingo, 23 de octubre de 2022




Aquí te guardo un espacio entre mis costillas para ti, hay leche y galletas, y si no te apetece, también sé cómo cocinarte algo.

 -Me formó la dualidad de dos personas opuestas entre sí, una por su parte pensaba que con amor y con abrazos se quitaba desde el frío hasta el hambre, y la otra que decía que la luna siempre estuvo hecha de roca y no de queso. No me corresponde juzgar sus formas ni sus limitaciones, a final de cuentas siempre he tratado de tener lo mejor de ambas partes, pero muchas veces gana el miedo a sus extremos, ¿Estaré soñando más de la cuenta?, ¿Estaré siendo demasiado realista? Mientras trato de existir y sobrevivir como individuo.

Viví gran parte de lo que debió ser una niñez tranquila guardando mis cosas de urgencia en cajas y bolsas por las prisas de salir corriendo a mitad de la noche con tal de esquivar un cobro de alquiler, para al día siguiente hacer como si nada hubiera pasado mientras desempacaba otra vez en un lugar distinto al de ayer. Hubo muy poco tiempo para echar raíces y cultivar las cercanías, el presupuesto alcanzaba para un techo, pero no para mantener las amistades, desde entonces me acompaña un constante estado de alerta donde siempre hay que estar atento a cuándo será la próxima vez que ya no exista el lugar al que llamo casa y tenga que empezar de nuevo otra vez. Esa tal cual es mi herida personal.

Me sigue costando tanto dolor desarmar las piezas que me hacen ruido, para limpiarlas, repararlas y tratar de hacerlas funcionar de nuevo, desconocer cómo saber gestionar a tiempo mis emociones no me exime ni me excusa de haberte lastimado en mis procesos, por eso y más te ofrendo un altar de disculpas que vienen envueltas con todo este amor imperfecto que te tengo. Si bien has padecido el frío de mi lado más oscuro, cierto es y por mucho, que ha sido más mi luz y el calor de mi alma lo que te ha abrazado en mi paso por tu vida. 

Hoy en día me siento como un total extraño que se acerca insistentemente a tratar de persuadirte que me dejes conocerte, saber de ti y las cosas que te gustan. Pase lo que pase es preciso que sepas que nadie nunca en esta vida, ha tenido en sus manos mi corazón tan rojo como lo tuviste y como aún lo tienes para ti.

Nos conocimos libres de dolor, he intento con todo mi amor ir quitando de a poco las piedras que nos hemos venido echando encima, hay días como hoy donde todo pesa tanto que se vuelve difícil respirar a través de los escombros, me abruman las oleadas de miedo que da pensar tantas cosas, si aún te soy suficiente, si alguna vez lo he sido, si todavía piensas que soy atractivo o si es que me deseas todavía como yo te deseo a ti. 

Desde muy temprano en la mañana no he dejado de estar a punto de romper en llanto, es como tener un cactus atorado en mi garganta, tengo esta sensación aplastante de que algo sucede o está por suceder, puedo sentirlo desde aquí, no puedo pedirte que esperes pues me has esperado tanto como yo a ti, solo puedo pedirle con toda mi alma a la vida que no nos pierda de lugar, me da tanto miedo perder la oportunidad de poder quererte bonito como yo lo hacía, tengo tantas cosas de mí qué mostrarte todavía.

Me faltas, no te olvido.


Quisiera pensar que no solo en mi sucede, pero han habido ciertos momentos en el día en los cuales pudiera jurar que ambos sentimos las cosas justo al mismo tiempo. 

Es como un eco que dice..."Detente un momento, respira, mírame, acércate y siente esto, aquí estoy".




Cable a tierra


Quizás no lo sepas pero esto siempre ha sido mi momento de tregua al final del día, era justo ahí donde no tenía más por qué tener la guardia arriba y simplemente me soltaba a mi mismo y a todo lo que sostenía.

No se duerme ni se sueña mejor sin ti.



 

viernes, 21 de octubre de 2022

Los que en verdad lo saben dicen que, "Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse a pesar del tiempo, del lugar, y de las circunstancias. Y que ese hilo puede tensarse o enredarse, pero nunca podrá romperse".

Sería incapaz de hacerte total responsable de todo mi sentir pues yo mismo me até a conciencia ese hilo a mi dedo índice, justo allí donde se encuentra el lunar que compartimos en común, el mismo que se alinea con el tuyo cuando juntamos nuestras manos.

Pensar que coincidimos solo por azar sería ignorar las causalidades que nos trajeron hasta aquí. De entre cientos de millones de ambulantes en algún punto de la historia, nuestros pasos se encontraron entre sí. Para mí, decirnos sí, siempre ha sido la mejor de las respuestas que nos hemos dado cuando nos preguntamos ¿Qué es lo que hacemos aquí?.

Te he querido a mares, en calma y en tormenta, te he querido incluso también en el dolor, Hemos tirado de ese hilo con tantas fuerzas hasta lastimar, y otras veces se ha soltado al punto del arrastre, que quizás nos haya hecho dudar si lo llevamos puesto todavía. El extremo del mío lo tengo en el mismo sitio donde me lo puse el día que te conocí.

He fallado en conmoverte, en emocionarte, en inspirarte, he fallado en cuidar de este hilo rojo que nos une aún también en lejanía. Te he estado tejiendo un abrigo nuevo que nos cubra a los dos con el amor que no sabía cómo darte y que siempre tuve aquí conmigo para ti.

Te llamo a través de estas letras, como cuando niños se jugaba a hablar con alguien al otro lado de la habitación con un vaso atado a un pedazo de estambre, y tenías que intentar guardar silencio para así lograr oír lo que cada quién tenía qué decirse, así mismo aquí y ahora, entre todo el caos y dolor que causa la incertidumbre, toco despacio de este hilo como a una cuerda, para hacerlo resonar esperando que me escuches allá hasta donde sea que tú te encuentres. 

Desde este extremo de la hebra, te cielo hasta las nubes.

 


 

domingo, 16 de octubre de 2022

Antes que nada, te escribo esto con todo el amor que te tengo y que vive desde hace tiempo refugiado en lo más profundo de mi ser, ahí donde los malos ratos no lo han alcanzado del todo y donde aún puede, a pesar de ti, de mí, y de nosotros, seguir creciendo todavía.

Te escribo desde afuera de todas mis manías, de mis ansiedades, de cualquiera de mis apegos emocionales, desorganizados, evitativos o como gustes diagnosticarlos. Nos tengo tanta fe aquí adentro, te escribo desde la consciencia misma, allí donde habitamos sin dañarnos a nosotros ni a terceros.

He pasado varios días pensando en cómo responderte una pregunta, ¿Cómo tratar de explicarte mis sentimientos?.

Puedo intentar el fondo, pero quizás no se entiendan del todo las formas, insisto, es complicado tratar de explicar un sentimiento.

Para empezar debes saber que mi querer hacia ti no está atado a tu presencia, ni tampoco se exacerba en tus ausencias, no te quiero porque tú me quieras, ni te quiero para que tú también lo hagas. Siendo honestos, en esta precisa etapa de mi vida, la realidad es que ni siquiera estoy cierto de que aún me quieras todavía. Aun así, te quiero porque quiero quererte, así, con toda esta redundancia amontonada en estas letras. 

Y es que hay que entender algo importante, uno no hace un consenso previo entre la mente y el corazón cuando se trata de darle residencia a una persona ajena a uno mismo, simplemente sucede, más allá de reacciones químicas o explicaciones psicológicas, el querer a alguien es intangible, pero irónicamente se siente como si uno pudiera tocarlo y sostenerlo con las manos.

Admito mis culpas, cada una de ellas, lamento mis maneras, mis intermitencias, pero también deben contar de algo mis permanencias y mis constancias. Para nada se trata de dar excusas, pero a pesar de todos mis años, aún sigo aprendiendo día con día cómo se debe entregar un corazón sin temor a que algo malo va a pasarle.

Quizás esto no haya respondido ninguna de tus dudas, pero al menos quería empezar por intentarlo.

domingo, 9 de octubre de 2022

 No suelo rezar, no soy muy adepto a las deidades, pero cuando voy a dormir, sea a la hora que sea, siempre pido a cualquier energía por encima de mi, que al despertar algo bueno te suceda.

miércoles, 5 de octubre de 2022

No te necesito

Soy absolutamente funcional con o sin tu presencia, el que seas testigo o no de mi existencia no me hace respirar menos ni más, o me impide realizar tareas cotidianas.

He sido individuo y libre pensador treinta y ocho vueltas al sol y contando hasta la fecha, un poco más de la mitad de ellas han transcurrido sin tu intervención en mi plano astral, sentimental o de conciencia.

De verdad te lo digo, no te necesito en mi vida.

Quiero compartirla contigo que es distinto, mucho muy distinto.

Te quiero en mi vida porque es ahí donde puedo atreverme a compartirme a mí mismo, -a veces con miedo- lo que amo, lo que me emociona, mis fortalezas y también mis debilidades.

Es ahí, en la intimidad contigo donde me doy de una manera diferente de lo que obtiene de mí el resto de la gente

No te necesito para ser yo mismo, pero amo inmensamente cómo puedo ser más cuando estoy contigo.

domingo, 2 de octubre de 2022

¿Cómo haces para guardar tantos recuerdos?

Esta para nada una pregunta suspicaz ni con intención alguna de atacarte, es que en verdad que ya no sé dónde más ponerlos, créeme, van saliendo por montones de todos lados y en cualquier momento, incluso si respiro se expanden aún más y si antes cabían cuatro, después de eso ahora apenas uno cabe de vuelta en su lugar.

Y no es la culpa de ellos, solo existen sin distinguirse entre sí, les importa muy poco si es uno de los míos o alguno de los tuyos, o si están enumerados o calificados entre malos y buenos o si están acomodados por estricto orden de aparición.

¿Qué has hecho con todos ellos?, de entre varias dudas, esa en particular es la que más me ha venido quitando el sueño.

¿Se pueden comprimir al tamaño de una píldora pequeña y tomarla con sorbo de agua?, o será como cuando de niño comías por error una semilla de limón y te decían que te crecería un árbol desde las entrañas?

Esta no es una queja y mucho menos un reproche, no sabes cuánto amo aun poder tenerlos todos y cada uno de ellos, pero ciertamente son tantos, pero en verdad demasiados que ya no sé dónde más ponerlos, y no quiero que se me vayan a dañar.

Desde el sitio en donde siempre estoy pensando en ti y tu tan lejos de aquí.

A falta de café me preparo un té deseo mientras desafino mi intuición, esperando no atinarle a algún presagio en el intento.

Para nada es mi primer naufragio arriba de esta balsa, no hace falta ser tan piscis para distinguir en la distancia, que parte de lo que ahora pasa, suele dar inicio a lo demás que está por suceder.

De tan solo ver la forma de esas nubes, uno sabe bien qué tanto cielo va a caerse.